Ortodoncia Infantil y Uso de la Máscara Facial: Todo lo que Debes Saber

La ortodoncia es una especialidad de la odontología encargada de corregir los problemas de alineación y crecimiento en los dientes y huesos maxilofaciales. En el caso de los niños, las intervenciones tempranas pueden ser cruciales para prevenir complicaciones mayores en el futuro, y uno de los tratamientos más importantes en ortodoncia infantil es el uso de la máscara facial ortopédica.

¿Qué es la máscara facial en ortodoncia?

La máscara facial es un dispositivo ortopédico extraoral que se utiliza principalmente en niños para corregir alteraciones en el crecimiento de los huesos faciales. Este aparato ayuda a dirigir el crecimiento de la mandíbula superior (maxilar) hacia adelante, logrando una mejor armonía entre ambos maxilares.

¿Para qué sirve la máscara facial?

La máscara facial en ortodoncia está diseñada para corregir una de las maloclusiones más complejas: la Clase III esquelética. Este tipo de maloclusión se presenta cuando el maxilar superior es más pequeño y está más atrasado que la mandíbula inferior, lo que puede causar una mordida inversa (también llamada «mordida cruzada anterior»). La mordida cruzada ocurre cuando los dientes inferiores están delante de los superiores al morder, lo que puede provocar problemas tanto estéticos como funcionales.

¿A qué edad se recomienda el uso de la máscara facial?

La máscara facial es más efectiva en niños en edad de crecimiento, generalmente entre los 6 y 10 años. Durante esta etapa, los huesos maxilares todavía están en desarrollo, por lo que la ortodoncia interceptiva puede guiar y corregir el crecimiento óseo de manera más sencilla. Es vital realizar una evaluación ortodóntica temprana, ya que los mejores resultados se obtienen cuando el crecimiento facial aún puede modificarse. En algunos casos, la intervención temprana puede evitar la necesidad de cirugía ortognática en la edad adulta.

¿Qué problemas trata la máscara facial?

El uso de la máscara facial está indicado para corregir las siguientes condiciones:

  1. Mordida cruzada anterior: Cuando los dientes inferiores están posicionados por delante de los superiores.
  2. Clase III esquelética: Desarmonía en el crecimiento de los huesos faciales, donde el maxilar superior está retrasado en comparación con la mandíbula inferior.
  3. Retrognatismo maxilar: Falta de crecimiento adecuado del maxilar superior.
  4. Problemas funcionales: Dificultades al masticar o hablar, que pueden estar asociadas a una mala oclusión.

¿Cómo se usa la máscara facial?

La máscara facial suele utilizarse en combinación con otros aparatos como expansores del paladar o brackets. El dispositivo debe usarse entre 12 y 16 horas al día, principalmente durante la noche y en casa, lo que minimiza las molestias estéticas durante las actividades diarias del niño. El tratamiento puede durar entre 9 y 12 meses, dependiendo de la severidad del problema y la respuesta del paciente.

Importancia del diagnóstico temprano

El diagnóstico precoz es clave en la ortodoncia infantil, ya que permite corregir problemas de maloclusión a una edad temprana, cuando los resultados son más predecibles y efectivos. Si sospechas que tu hijo puede tener una maloclusión o problemas de crecimiento óseo, es recomendable acudir a un ortodoncista para una evaluación exhaustiva.

Conclusión

La máscara facial es una herramienta esencial en la corrección de maloclusiones complejas en niños, particularmente en aquellos con problemas de Clase III esquelética. Su uso temprano puede marcar una gran diferencia en el desarrollo facial y evitar complicaciones más serias en el futuro. Consultar con un ortodoncista a tiempo es fundamental para asegurar un crecimiento saludable y una sonrisa funcional.

Para más información sobre tratamientos ortodónticos en niños y otras opciones disponibles, no dudes en consultarnos 🦷

Leave a reply